Una de las más impresionantes, majestuosas e impactantes llanuras de toda la Comunidad Autónoma, por su aparente infinitud, son las que conforman la milenaria e histórica comarca de Tierra de Campos, denominada así ya desde el siglo XIII, una vez que abandonó la más antigua de Campos Góticos. La Tierra de Campos es una de las comarcas naturales, con mayor singularidad y personalidad propia, debido sin duda, entre otras causas, a la clara delimitación geográfica y a la homogeneidad de sus caracteres, otorgando de esta forma al territorio una cierta unidad geográfica.
La Tierra de Campos, ocupando una posición central en la Cuenca al norte del río Duero, se extiende como una suerte de rectángulo inclinado en sentido noreste-suroeste por aproximadamente 5.000 Km2 de las provincias de, sobre todo, Palencia y Valladolid y en menor medida de Zamora y León. El sector palentino, con más de 2.000 Km2, ocupa la mayor parte de esta comarca. La Tierra de Campos en Palencia, situada en la mitad meridional de la provincia, está limitada al norte por las terrazas fluviales de la Valdavia-Cueza, Ojeda- Boedo y la Ribera de Saldaña, al sur por los páramos calcáreos pontienses del Cerrato, al oeste por la Tierra de Campos vallisoletana y al este por el límite natural de toda la comarca, el río Pisuerga, lindando ya con la provincia burgalesa.